La causa por presuntas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) incorporó nuevos elementos que agravan la situación del empresario Miguel Ángel Calvete y de su hija Ornella, recientemente desvinculada del Ministerio de Economía.
Los mensajes analizados forman parte del expediente que instruye el fiscal federal Franco Picardi, donde se investigan posibles coimas, direccionamiento de contratos y uso indebido de fondos públicos.
De acuerdo con la línea de investigación, Calvete habría funcionado como enlace entre laboratorios y las autoridades de la ANDIS, señalando qué proveedores debían recibir adjudicaciones. Su relación con el exdirector del organismo, Diego Spagnuolo, y con su segundo, Daniel María Garbellini, es uno de los puntos que la fiscalía considera centrales.
Los chats fechados el 10 de septiembre muestran a Ornella Calvete involucrada en conversaciones sobre contratos, porcentajes y operadores, dando indicios de conocimiento del funcionamiento interno del esquema investigado. Uno de los mensajes mencionados por la fiscalía incluye una referencia a un “3% para KM”, un dato cuya interpretación aún no fue confirmada oficialmente, pero que quedó incorporado a la pesquisa.
En los allanamientos del 9 de octubre, la Policía Federal secuestró 700.000 dólares en efectivo en la vivienda de Ornella Calvete, suma cuyo origen no fue justificado.
Con estos nuevos elementos, la causa suma presión institucional y amplía el alcance de las responsabilidades que se intentan determinar.
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